ElectroGraf Center, Dornbirn

Baumschlager Eberle Architekten 


La fusión de la sede central de la compañía electrónica Graf con dos de sus sucursales, que hasta entonces habían sido independientes, para formar un conjunto empresarial único, planteó la necesidad de ampliar el edificio original, localizado en Dornbirn, que pertenece a la región de Vorarlberg, en el extremo occidental de Austria. El cliente solicitó que esa ampliación se materializase un edificio de gran impacto visual, que expresara separadamente los elementos independientes del nuevo conjunto pero que, al mismo tiempo, reflejara una imagen de unidad.

Las condiciones de partida no eran fáciles. Por una parte, el edificio de oficinas y producción existente no era demasiado atractivo, y por otra, las condiciones del suelo se caracterizaban por un nivel freático extremadamente alto y una serie casi interminable de capas de grava no portante, con una profundidad de hasta cien metros en algunos puntos.

Para hacer frente al primero de estos problemas, se decidió revestir uno de los cuerpos del edificio existente con listones horizontales de madera de alerce, buscando el contraste compositivo con el hormigón visto y el vidrio dominantes en el nuevo edificio destinado a investigación, producción y almacenamiento. Por razones de tráfico y comunicación, éste se ha organizado en un volumen de planta cuadrada situado junto a las construcciones existentes y, al igual que éstas, de una sola planta. El cuerpo destinado a la administración, al que corresponde la principal función representativa, se ha concebido como un ‘puente’ común a ambas partes, la antigua y la nueva. En su forma final, el conjunto, constituido por tres edificios diferenciados, da lugar a un patio abierto con tres lados que sirve como almacén de objetos de gran tamaño.

Tres pares de pilares
El edificio-puente de administración adopta la estructura de una viga cajón que arranca de la cubierta del nuevo edificio de producción, sostenida por sendos pilares planos que lo atraviesan, y vuela por encima del cuerpo delantero del edificio antiguo. Debido a las condiciones del terreno, no era posible añadir carga adicional sobre el edificio existente, pero había espacio para llevar a cabo un pilotaje de fricción a cada lado del mismo. La estructura final para cargas verticales está formada, pues, por una secuencia de tres pares de pilares.

La distancia entre el sofito del nuevo cuerpo y el plano de cubierta del antiguo se ha cerrado con una estrecha franja acristalada e iluminada por una banda de tubos fluorescentes para acentuar la diferencia entre ambos. Este motivo se ha repetido en el encuentro con el nuevo edificio de producción, poniendo así de manifiesto la unidad entre lo existente y lo añadido.

Resuelto estructuralmente en hormigón armado, el edificio-puente se ha revestido de paneles de contrachapado de color rojo brillante. Desde lejos, este color contribuye a la deseada visibilidad del conjunto. El número total y las dimensiones finales de los huecos corresponden, tanto en anchura como en altura, a las máximas permitidas, dado el carácter de la viga cajón y el flujo de fuerzas resultante.

En el interior se ha dejado vista la estructura de hormigón, aunque pintándola de blanco, para permitir a los usuarios experimentar el espacio de la viga hueca…[+]


Obra
Ampliación de la empresa electrónica Graf, Dornbirn, Austria.

Cliente
Elmar Graf.

Arquitectos
Cario Baumschlager y Dietmar Eberle.

Consultores
Emst Mader (estructura).

Contratista
I + R Schertler.

Fotos
Eduard Hueber.