Casa en la playa, Punta Ixtapa
LCM  Fernando Romero 

Casa en la playa, Punta Ixtapa

LCM  Fernando Romero 


México es uno de esos países en los que las playas pueden ser de propiedad privada. En el fragmento costero del estado de Guerrero proliferan viviendas de lujo que privilegiadas por tal condición, salpican la costa volcadas al mar, sin obstáculo alguno que contenga la relación directa con el frente marítimo. El clima en esta región del país es cálido, con una humedad constante y lluvias fuertes durante la noche en los meses de verano y parte del otoño. El invierno por el contrario es seco, mientras el sol brilla todo el año. Una casa de vacaciones, diseñada para que una familia numerosa disfrute de días de playa y descanso, se abre al océano Pacífico en este excepcional paraje.

Las ordenanzas urbanísticas determinaban la obligación de construir con piedra en tonos natura-les y emplear cubiertas de teja o palapa (hoja de palma, habitual en la zona), con la idea de preservar el estilo tradicional de la arquitectura del lugar. Sin dejar de lado todos estos requerimientos, la casa se desarrolla en base a una superficie única que al plegarse sobre sí misma define y separa los distintos espacios: las áreas públicas de las más privadas, la planta baja de la planta superior. El empuje del viento o el azote de las olas contra las rocas parece haber erosionado esta superficie, generando con ello las distintas estancias, pasillos, escaleras, huecos y terrazas presentes en la vivienda.

Un pequeño paseo atraviesa el jardín y penetra la casa por su cara norte, conduciendo directamente hasta el salón principal. Aquí permanece la sensación de estar habitando la oquedad de una roca, aumentada de escala: muros y techos se unen pintados de blanco, mientras el horizonte marino, domesticado en una lengua de agua que da lugar a la piscina, constituye el frente visual de la estancia, completamente abierta. Mesas, sillas y sillones amueblan el estar-comedor haciendo suyas las curvas que moldean el espacio. Alrededor se alinean, en forma de U, la cocina, un pequeño cuarto para la televisión y el dormitorio principal. Una estrecha escalera asciende abriéndose paso por uno de los costados hasta situarse en la planta superior. Convertida en un distribuidor interior, muere en el centro de la planta en torno a un hueco vertical, cuya misión es trasladar la luz natural, proveniente de un lucernario ganado a la cubierta, hasta la sala de la televisión, en la planta baja. A ambos lados del corredor, ocho dormitorios se orientan al norte y al sur: asoman en la fachada con pequeños huecos irregulares los primeros, y se entregan al océano con amplios ventanales y terrazas los segundos... [+]


Arquitectos Architects

LCM/Fernando Romero

Colaboradores Collaborators

J.P. Maza, M. Seligson, T. Bilbao, E. Gadea, I. Arellano, M. Palardy, A. Hernández, E. Giner de los Ríos, G. Elizarrarás, V. Jaime, M. Carrillo, D. Téllez, R. Ramos, M. Nájera 

Consultores Consultants

DYS (estructura structure); INTER(instalaciones mechanical engineering); R. Vivar (maqueta modelling); René Cruz (construcción construction)

Fotos Photos

Paul Zcitrom, Luis Gordoa, LCM